Hace algún tiempo leí una entrevista, de la que no recuerdo gran cosa, a un famoso cantante y compositor, del que no recuerdo el nombre, cosas de la edad, pero si recuerdo una de las preguntas y su correspondiente respuesta. Venía a ser algo así como ¿qué es lo más importante para lanzar un éxito, tener una melodía pegadiza, un estribillo impactante…? La repuesta fué: «Lo más importante es tener una historia que contar».
Como personas que nos dedicamos, o al menos lo intentamos, a comunicar, a crear comunidad, a crear confianza, es realmente importante tener una historia que contar. Una historia veraz narrada con sinceridad, en la cual creamos y con la que estemos verdaderamente comprometidos, pues sólo así conseguiremos que otros la hagan suya y la compartan.
Un billete falsificado es prácticamente idéntico a uno original, de hecho circula porque se parece al original, pero nadie quiere un billete falsificado y cualquiera se indignaría, y con razón, si se le intenta pagar con uno de ellos. Cuando contemos algo, estemos seguros de que nuestra historia sea verdadera.