Según un estudio de la web educativ.wikispaces la vida media de un blog es de unos 15 meses y, según otros datos, el 95% de los blogs echan el cierre antes del primer año. La mala noticia es que si pensabas que pasar del primer año ya era señal de haber conseguido superar la criba deberías replanteártelo. La buena noticia es que, teniendo en cuenta que el 95% no aguanta un año, la edad media de los que sobrepasan los 15 meses debe ser bastante alta. Veamos cinco pautas para conseguir alargar la vida de tu blog.
Apasiónate con la temática de tu blog
Una de las principales causas de mortalidad «blogueril» es el aburrimiento. Como cualquier otra actividad, llevar bien un blog supone establecer una nueva rutina y si esta no te motiva o te reta acabará llevándote al aburrimiento y al abandono de la misma.
La solución a este problema es muy sencilla: evita escoger la temática de tu blog mirando solo una lista de palabras claves de Adwords y céntrate en aquellas cosas que realmente te apasionan.
Una vez escuché que la mejor forma de encontrar tu vocación es localizar aquellas actividades por las que estarías dispuesto a pagar para que te dejaran hacerlas, y creo que este planteamiento puede ser una muy buena guía para escogerla y evitar que acabes abandonando a las primeras de cambio.
Planifica los contenidos
Otra de las causas contra la que hay que luchar para alargar la vida de tu blog es el estrés de tener que escribir periódicamente y que llegue el día y no sepas de qué escribir. Para evitar este problema es muy aconsejable que dediques tiempo a planificar los contenidos de los próximos meses.
Con esto conseguirás tener la sensación de mantener el control y no tener que estar rompiéndote la cabeza ante la pantalla en blanco y con la fecha ya pasada. Para esto sí puedes servirte del análisis de palabras claves de tu temática y de otras herramientas o acciones muy sencillas de implementar o usar. Te dejo un par de enlaces que te pueden ser útiles:
Mantente actualizado
Un blog también puede «fallecer» por inanición de ideas. El objetivo del blog es aportar valor a tus lectores y si no te actualizas continuamente tus contenido se irá quedando obsoleto y tus visitas caerán hasta desaparecer.
La única forma de que tus lectores te sigan es que te mantengas un paso por delante de ellos, así que lee, investiga las nuevas tendencias, aporta tu visión sobre los nuevos avances. En suma, mantente útil para tu comunidad.
Reinvéntate periódicamente
La vida es evolución y cambio, por ello debes ser sensible a los cambios de tendencia, tanto de contenidos como de estética y evolucionar con ellos. Anclarte en una imagen estática lo único que hará es quitarle la frescura que todo blog necesita.
Así que, si te mantienes actualizado en cuanto al «estado del arte» de tu temática esto debe reflejarse también tanto en la forma de compartir dichos contenidos como en la estética y diseño del propio blog.
Interactúa
Finalmente, si quieres que tu blog perviva en el tiempo crea una comunidad a su alrededor y, para ello, nada mejor que interactuar con tu comunidad y que favorezcas los intercambios entre los propios miembros.
Ese intercambio permitirá que tu blog deje de ser visto como un mero proveedor de conocimiento y pase a tener una conexión más emocional para tus lectores: Un sitio donde compartir experiencias con otras personas, donde escuchar y ser escuchado.
Mantener un blog y conseguir que su vida sea larga requiere los mismos ingredientes básicos que cualquier otra actividad: Hay que dedicarle tiempo, pasión y esfuerzo. Pero cuando realmente haces algo que te apasiona los resultados son siempre mucho más valiosos que cualquier esfuerzo que hayas podido realizar.
¿Tiene tu blog más de 15 meses? ¿Nos cuentas cómo lo has conseguido?
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Fotografía por Shironeko Euro en Flickr (CC)
Bueno, yo todavía no he cumplido el año pero teniendo en mente estos consejos espero llegar y cumplir muchos más.
Hola Quiviro
Muchas gracias por tu aportación y ánimo, si te gusta lo que haces y le sigues poniendo imaginación y ganas no hay límite.
Saludos
Hola David!
He llegado aquí a través de un comentario tuyo en Shibami And Me, me gusta mucho leer a Alex.
Estoy de acuerdo con lo que dices en este post. Vale, no con todo pero es una opinión muy particular. Yo si planifico con demasiada antelación pierdo la gracia así que yo me dejo llevar y combato la hoja en blanco con soluciones creativas que no siempre gustan. Pero bueno.
Mi blog está rondando los 5 meses desde que empecé a escribir de forma asidua pero estoy convencido de que no puede morir. Espero llegar a ser uno de los que compense la estadística.
Un saludo David! 🙂
Hola Victor
Que vengas previamente del blog de Alex ya me pone el listón más alto.
En mi caso, y dada la temática es más fácil planificar contenidos y me viene muy porque cuando tengo mucha faena no tengo que romperme la cabeza con el ¿y de qué hablo hoy?
De hecho, he llegado a tener programados contenidos con casi un mes de antelación, aunque si «llega» algo de especial interés no dudo en cambiar la programación.
Saludos y muchas gracias por tu aportación.
Yo tampoco soy muy de planificar. Hay veces que sí, que tengo una pequeña lista de temas sobre los que escribir y la voy vaciando, pero como mi blog va muy ligado a la actualidad, tanto la general como la mía propia, suelo cocinar los posts al momento. Hay días que cuesta más que otros, entre otras cosas porque no siempre se siente uno inspirado, pero procuro mantener cierta regularidad, sin que resulte esclavizante, pero tampoco caótica. De lo que estoy plenamente convencido es que ‘la recacha’ tiene una larga vida por delante. Saludos!
Hola Benjamín
Una vez escuché que un maestro de artes marciales comentó que había dos tipos de luchadores, el hábil y el torpe. El hábil domina un nuevo movimiento con apenas unos minutos de entrenamiento, mientras que el torpe necesita semanas y semanas.
Pero solo es cuestión de tiempo que ambos lo cojan igual. A mi me ha tocado el tener que dedicarle tiempo y, como le decía a Víctor más arriba, en mi caso es más fácil (y más necesario) el poder planificar, a ver si un día os cojo.
Por cierto, ni se te ocurra plantearte lo de «La Recacha» de otra forma.
Saludos
Descuida, David, no sabría hacerlo de otra forma. Como mucho, quizás diferencie el blog propiamente de opinión/reflexiones de los artículos que escribo sobre ‘El viaje de Pau’. Ahora que empieza a despegar comercialmente puede ser una buena opción dedicarle un «subblog» exlusivo. Además, no todos los que entran en ‘la recacha’ tienen por qué estar interesados en mi faceta de escritor. No sé, es una cosa que todavía tengo que acabar de decidir. Un abrazo!
Hola Benjamín,
Aparte de un subblog podrías crear un grupo en Facebook y/o Google+ donde la gente pueda comentar sus experiencias con el libro y te sirvan de herramienta de creación de comunidad y de promoción (me salió la vena de social media strategist).
Saludos
No eres el primero que me lo propone, pero no sé si «el fenómeno» ha crecido tanto como para crear un grupo dinámico. Desde luego que es una idea que tengo en mente… pero, chico, el tiempo da para lo que da. Como a alguien se le ocurra preguntarme si no estoy buscando empleo le doy una colleja, jaja… Saludos!
Muy interesante! El mío cumplió dos años en septiembre y ahí sigo 🙂 Creo que lo más importante es lo primero que comentas, que te guste y que no se convierta en una obligación. Un saludo.
Hola Mírian, !enhorabuena! y tras visitarlo no dudo que seguirá unos cuantos años más.
Creo que si te hay algo que te gusta aprovechas cualquier momento para hacerlo y nunca lo llegas a ver como un trabajo.
Muchas gracias por tu aportación
Saludos
Iba recorriendo Twitter y de repente vi este tema. Qué apropiado para mí en este momento. Voy a planificar mejor el contenido de mi blog para no caer en el aburrimiento. Me encanta cuando escribo y confieso que en ocasiones no sé de qué escribir. A veces la cantidad de ocupaciones me ocupan y no tengo el tiempo que necesito para esto, pero hasta eso debo planificarlo. Bien, gracias por escribir sobre este tema, me ha inspirado hoy. Saludos!
Hola Jackie.
Muchas gracias a ti por aportar tu comentario. Ha sido un placer contar con tu visita y me alegra que te haya sido útil.
Nos vemos.