Como buen vasco me gustan los programas de gastronomía, y hace unos días, en un episodio de Rick Stein sobre la gastronomía del Mediterráneo, y en concreto de la isla de Corfú, comentaba que sólo con cinco ingredientes podían crear decenas de platos diferentes, porque lo importante era el respeto con el que trabajaban una materia prima de calidad. De igual forma, para construir un buen blog no hacen falta muchos ingredientes, sino un profundo respeto a tu audiencia y a tu «materia prima», tu conocimiento.
Habla de lo que necesita tu audiencia
Puede que tu vida sea muy interesante y que tu audiencia quiera conocerlo todo sobre tí pero, si este no es el caso, es preferible que hables de las necesidades de ellos. De hecho, para construir un buen blog es bueno que pienses en tu audiencia como en clientes. Estarán dispuestos a pagar con su atención (y quizá con su dinero) si les resuelves una necesidad (conocimiento, entretenimiento, etc.)
Para ello, si ya tienes un blog y una comunidad investiga sobre lo que realmente sea su necesidad, y si todavía no tienes el blog en marcha entonces busca tu nicho cruzando tu conocimiento con las necesidades que detectes en los comentarios de otros blog o en redes sociales.
Pero, como te diría un buen negociador, intenta discriminar entre su posición (p.e. quiero una casa más grande) y su verdadero interés (p.e. necesito poder tener todo ordenado). Porque no siempre coinciden posición e interés y si tienes que elegir elige dar respuesta a su interés porque, con ello, acabarás ganando su atención y su respeto.
Usa contenido de calidad
En cuanto al contenido de tus artículos, no tengas reparo en utilizar tu mejor material. Si tu objetivo es compartir conocimiento no tiene sentido que te guardes información y si tu objetivo es apoyar tu marca personal es importante que muestres que realmente sabes de lo que hablas.
Por supuesto, esto no está reñido con monetizar tu conocimiento, por ejemplo dando acceso premium mediante suscripción a compilaciones temáticas, a ebooks o a cursos con documentos mucho más amplios y elaborados.
Menos es más
Finalmente, ten presente que menos es más. Dar el mejor contenido no quiere decir que los artículos hayan de ser largos o tengas permitido regodearte en detalles innecesarios que no aporten valor a los artículos. Recuerda que los malos cocineros se exceden con las especias para enmascarar el sabor de carnes o pescados estropeados o en mal estado.
Por ello, cuando hayas terminado el artículo repásalo varias veces y elimina todo aquello que resulte superfluo o inútil. Como dijo Antoine de Saint-Exupèry: La perfección no se alcanza cuando no hay nada más que añadir, sino cuando no hay nada más que quitar.
Resumiendo
Evidentemente hay otros muchos aspectos a considerar para tener un buen blog (diseño, ortografía, planificación, etc.), pero si la base del blog no es la correcta lo único que conseguirás es resaltar la baja calidad de tu aportación.
Por contra, trabajar con un respeto profundo por tu comunidad y tu «producto» hara que tu blog sea un buen blog aunque, al principio, flojees en algún otro aspecto.
¿Qué pasos consideras esenciales para construir un buen blog?
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Foodswings Meal por foodswings, en Flickr